• Representan un problema ambiental y son una amenaza para la salud pública

 

Los Cabos, B.C.S., 09 julio 2024.- Las personas que sean sorprendidas en flagrancia arrojando basura en los arroyos, serán acreedoras a severas sanciones por parte de las autoridades municipales, toda vez que se trata de un delito de grandes consecuencias que impactan negativamente al medio ambiente y sobre todo a la salud pública, así lo manifestó el coordinador delegacional de Ecología y Medio Ambiente en Cabo San Lucas Gustavo Castro Zumaya.

Dicha declaración, la emitió luego de efectuar un recorrido de supervisión en el arroyo conocido como El Salto en la delegación de Cabo San Lucas, el lunes 08 de julio alrededor de las 03:00 de la tarde, donde se detectó que personas a bordo de 2 camionetas se encontraban depositando cartones y jabas de plástico en las inmediaciones del lugar antes mencionado.

Al respecto, Gustavo Castro Zumaya, informó que el personal de la Coordinación Delegacional de Ecología y Medio Ambiente, solicitó el apoyo de elementos de la Dirección General de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal, quienes acudieron al arroyo con la grúa de la dependencia para trasladar los vehículos al módulo y disponer las sanciones pertinentes.

De igual manera, explicó que las personas que incurren en estas faltas reciben una multa que va desde los 10 a 10 mil Unidades de Medida y Actualización (UMA), lo cual representa la cantidad de $1 mil 085.70 a 1 millón 085 mil 700 pesos.

Asimismo, mencionó que para garantizar el derecho humano a un ambiente sano y evitar que los residuos terminen en el mar, el Gobierno de Los Cabos por medio de las autoridades delegacionales de Cabo San Lucas, iniciaron con jornadas sabatinas de limpieza en canales y arroyos de la localidad, como una medida preventiva ante la presente temporada de huracanes que muy pronto arrojarán las primerias lluvias en la región.

Finalmente, el coordinador delegacional de Ecología y Medio Ambiente en Cabo San Lucas Gustavo Castro Zumaya, recalcó que esta mala práctica trae consigo severas consecuencias como la obstrucción de drenajes, contaminación del aire, suelo y agua, además de la aparición de fauna nociva.